En una sociedad en la que es muy común endeudarse para adquirir el último celular, tal vez les resulte difícil a los niños aprender con el ejemplo, de parte de sus padres y lo que pueden entender cuando ven a las personas al momento de pagar.
Recuerdo que cuando era niña, una pregunta que invadía mi cabeza frecuentemente era: ¿por qué algunas personas cuando llegan a caja entregan dinero en efectivo y otras tarjetas? , la curiosidad por saber como funciona y se administra el dinero, cada vez se volvía más incesante. Hasta que finalmente, me atreví a demostrar mi interés por el dinero, las tarjetas de crédito, gastos, pagos, y demás temas, que sin saber en ese momento, estaban relacionados a las finanzas personales.
Los rostros de mis padres, al notar mi extrema curiosidad por estos temas, se convirtieron en una mezcla de asombro, pasmo y maravilla. Los dos me respondían cada pregunta con palabras sencillas y ejemplos claros, si tenían un material cerca, lo tomaban y lo usaban para que la explicación sea más fácil y dinámica. Algunos días podíamos pasar horas y horas jugando al supermercado, un juego que consistía en simular que yo era la encargada de ofrecer alimentos y mi hermano, mi mamá y mi papá eran los clientes (al parecer estimulaban mucho el consumo porque me acuerdo que terminaban comprando todo). De esta manera iba entendiendo cómo se manejaba el dinero, pero sobre todo que el dinero no llega a tus manos inesperadamente, sino que se obtiene a través del trabajo y del esfuerzo.
Realmente son escasos los casos donde se enseñan finanzas personales desde niños. Por ello es importante que los padres tomen la iniciativa de inculcar la educación financiera, a través de hábitos y fomentarlos para de esta manera crear un vínculo entre el niño y el dinero desde una temprana edad. La importancia radica en que de esta manera al llegar a la juventud, ya contarán con una base, y así podrán ser personas financieramente responsables.
Recuerda que hay muchas maneras de enseñar educación financiera a sus hijos, desde sencillas explicaciones hasta juegos dinámicos. Otro mecanismo que puede emplear, es darle una mesada al término de la semana y ayudarlo con la distribución del dinero. Finalmente lo importante es que se empiece a fomentar este hábito para que cuando crezcan tengan una buena relación con el dinero.
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